Disneyland


Blog Arte, entrada # 8
Gabriela Monroy Yurrieta
Estética y Apreciación del Arte
Disneyland
Abril 21, 2018

Disneyland.



Durante las recientes vacaciones de Semana Santa tuve oportunidad de viajar con mi familia a Disneyland en Anaheim, California. Fue un viaje muy divertido por la compañía de mis seres queridos y, además pude aprender algunas cosas que desconocía.
          Disneyland abrió sus puertas a la prensa y a invitados especiales el 17 de julio de 1955, poco más de un año después de que diera comienzo su construcción​ y al día siguiente fue abierto al público en general.   La cadena ABC transmitió la inauguración en directo en un programa especial titulado Dateline: Disneyland, que tuvo una duración de 94 minutos. ​ La cobertura del evento fue catalogada como la mayor concentración de equipo de grabación por parte de una sola cadena de televisión.  Walt Disney dio un discurso de bienvenida en el que dijo: “A cuantos entren en este maravilloso lugar: ¡bienvenidos! Disneyland es su mundo. Aquí, la edad revive los gratos recuerdos del pasado y los jóvenes podrán apreciar el desafío y la promesa del futuro. Disneyland está dedicada a los ideales, a los sueños y a los acontecimientos difíciles que han forjado a los Estados Unidos, con la esperanza de que sea una fuente de alegría e inspiración para todo el mundo”[1].
          El parque temático original de Disney se encuentra dividido en diferentes áreas: Main Street U.S.A., Adventureland, Frontierland, Fantasyland, Tomorrowland, New Orleans Square, Critter Country, Mickey's Toontown y el de más reciente creación Disney California Adventure.
          De la misma manera, tuve la oportunidad de enterarme de algunos datos curiosos y anecdóticos sobre este parque que tiene más de 6 décadas de antigüedad:


-       El primer hecho anecdótico del cual pude conocer un poco fue sobre un departamento que tenía Walt Disney dentro del parque. El lugar mencionado se encuentra arriba de la estación de bomberos de Disneyland y hasta la fecha sigue intacto. Cuentan sus relatores que, durante el tiempo de construcción de este gran proyecto, Walt pidió que le elaboraran un espacio para poder pasar más tiempo cerca de la obra y poder supervisar más de cerca todos los por menores. Él, prendía la luz de su ventana siempre que se encontraba ahí para que los trabajadores supieran de su presencia. A partir de su deceso los dirigentes de la gran compañía que edificó decidieron que la lámpara en cuestión permaneciera encendida siempre como homenaje a Walt Disney.


-       También tuve la oportunidad de conocer la ubicación de uno de los clubes más exclusivos del mundo, su nombre es Club 33, y tiene su sede en Disneyland. Se ubica en “New Orleans Square” y es una puerta verde con un gran 33 que permanece cerrada a la vista de los turistas. Al investigar más al respecto de la misteriosa puerta conocimos el nombre del lugar y que para ser parte de él hay que formar parte de una lista de espera de al menos 10 años. Una vez concluido este tiempo, se deben pagar anualidades hasta 10,000 dólares para poder disfrutar de los deliciosos restaurantes y facilidades que se ofrecen dentro del parque. Su alto costo y su espera causan que sea poco accesible.
          Me resultó muy curioso conocer los dos lugares a los que hago referencia, nunca pensé que dentro de un parque de diversiones hubiera sitios con anécdotas tan interesantes. Aunado a ello, fue muy divertido disfrutar con mi familia de los juegos, la comida, los paisajes y las caminatas. Sin duda es una vacación que recomiendo ampliamente.
          Desde mi punto de vista, algo que provoca gran admiración es lo que se refiere a los mitos, las fábulas, las leyendas y los cuentos de hadas de grandes escritores como los hermanos Grimm, Charles Perrault, Carlo Collodi, Hans Christian Andersen, entre otros, que se han adaptado y, desde el primer momento, han sido una rica y abundante fuente de inspiración para los estudios Disney.  Así, a través de materiales originales, Disney ha desarrollado de manera magistral el arte de contar historias, para poder disfrutar del salto de personajes y tramas de la literatura clásica al movimiento y a la sensibilidad del cine de animación.



[1] Traducción de la dedicatoria de Walt Disney exclamada durante la inauguración de Disneyland. Disneyland (Programa de televisión). American Broadcasting Company.

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